Gualeguaychú: El país del carnaval

Reparto

Franco Heiler

Vilmar Paiva

Gaston Re

Guion

El Carnaval está representado con una precisión y vitalidad pintorescas. La película no muestra el desfile en sí, sino la preparación del mismo, las expectativas, las últimas horas antes del evento, cuando los cuerpos se transforman. La película convierte la víspera del acontecimiento en una fuente de misterio y emoción visual.

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Top review5/10 Un confuso docudrama in situ sobre los hombres y el carnavalResumen:En esta especie de docudrama en los lugares de los hechos seguimos a dos amigos y otros jóvenes que participan en las comparsas del carnaval de Gualeguaychú, con una cámara con la que el director Marco Berger se deleita en su trastienda, con límites confusos entre la realidad y la puesta en escena y una dinámica que se vuelve repetitivaReview: De un tiempo a esta parte, muchos cineastas están procediendo a estrechar los límites del documental, interviniendo de manera ficcional o metaficcional en el ámbito que abordan. Un ejemplo reciente es el confuso documental El agente topo, en el que, para hacer hablar a los ancianos de una residencia de ancianos, se les engañaba introduciendo un infiltrado que se hacía pasar por residente". En el caso de la película de Marco Berger, parece que se ha llevado a cabo una operación similar. Presenta su película como un documental, aunque hace una advertencia en los títulos iniciales. Quizás habría que definirla como "docudrama in situ", ya que la trama sigue a dos personajes que son actores y que son (¿o son?) amigos (Vilmar Paiva y Franco Heiler). Uno de ellos participa en las comparsas del Carnaval y el otro participa más como espectador cercano. ¿Son de Gualeguaychú? ¿Participan realmente en el Carnaval todos los años? Predominan las escenas de diálogo (con otros jóvenes que seguramente son comparsas de verdad), algún que otro reportaje, algunos durante los desfiles y muchos, pero muchos, en los vestuarios, con el regodeo habitual de los típicos primeros planos de Berger de colas y fardos y algunos desnudos de los chicos (chongos) y el backstage de cómo están "montados": maquillaje y un vestuario que parece una mezcla de starlet y gladiador. El resultado e incluso el objetivo de la película son, cuando menos, confusos (ayudados por un plano de sonido directo que dificulta el seguimiento de los diálogos) y cansinos por sus repeticiones: ¿intentó el director retratar un ambiente o sustrato potencialmente homoerótico en esos chicos que visten? sus trajes y desfilan con orgullo y sin conflictos o es todo fruto de la intervención que realiza y de sus proyecciones y marcajes... Quizás lo único claro es el concepto de carnaval como tiempo de licencias, en este caso las que se toman los jóvenes que componen las comparsas, con gran entusiasmo y orgullo.Ayuda-11